Revista Minúscula revela en exclusiva el próximo lanzamiento de un documental que explora la historia del río Areco y su impacto en la comunidad, a cargo de Sebastián García, Manuel Alonso y su productora delpueblo.
San Antonio de Areco, Buenos Aires – Se estrena el primer documental ambiental arequero y Minúscula recibió la primicia por parte de Sebastián García, su director.
Sebastián es director de cine y publicidad y fundador de la productora delpueblo. Además de su trabajo en el ámbito audiovisual, es un activista ambiental comprometido que ha impulsado iniciativas como Descontaminando y Misión Atlántico, buscando crear conciencia y generar cambios positivos en la relación entre las comunidades y su entorno.
De la idea a la acción
El corto documental, cuyo nombre aún no ha sido revelado, explora la historia del río Areco y la evolución de la relación entre la comunidad y sus aguas, afectada por el impacto de la contaminación.
El film fue realizado por delpueblo y se encuentra en fase de posproducción. En diálogo exclusivo con Minúscula, Sebastián compartió cómo fue el camino que lo llevó a elegir este tema para su primer corto documental: “Me motivó la idea de poder hacer algo por el lugar de donde soy”.
En su búsqueda por unir los mundos que lo convocan consideró la posibilidad de hacer una película sobre otras problemáticas ambientales de Argentina; hasta que se dio cuenta de que lo mejor que podía hacer era contar una historia del pueblo con foco en los problemas del lugar al que pertenece. “Creo que la mejor manera de encarar los problemas ambientales es uniendo a gente local”, asegura.
El proceso empezó en agosto del 2023 con una idea que de a poco fue tomando forma: “Los primeros meses fueron destinados a pensar y entender que queríamos contar y cómo lo queríamos hacer. Decidimos hacer una película representativa, contada por vecinos del pueblo, con sus relatos y vivencias”.
A partir de esa definición, el equipo se puso en contacto con diferentes personas y empezó las primeras conversaciones e intercambios de vivencias, opiniones y reflexiones.
Un equipo in-situ
Con orgullo, Sebastián cuenta que para llevar adelante el proyecto decidió conformar un equipo con la mayor cantidad de arequeros posible. Ese equipo está compuesto por Manuel Alonso, con quien trabaja hace años y a quien define como “un gran productor y por sobre todo amigo”.
Al compartirle la idea, Manu no dudó ni un segundo y fue quien lo impulsó a buscar apoyo arequero para la producción, la recopilación de imágenes, la filmación, la cobertura de acontecimientos e incluso la música. Algunas de las personas que participaron en la producción y realización son Joaco Telesca, Lulu Magdalena, Nahuel Alfonso, Isa Maiola y Gonzalo Meo.
“El objetivo que nos propusimos fue el de hacer una película que logre reflejar la profunda relación que tiene el río con la gente de Areco”,
cuenta Sebastián.
Un proceso de producción exhaustivo
La cuenca del río, que se extiende por 120 kilómetros y atraviesa varias localidades, ha sido objeto de estudios recientes que revelan altos niveles de plaguicidas y metales pesados. La problemática se ha acentuado debido a diversos factores, incluyendo prácticas agrícolas intensivas, la falta de regulación en el uso de agroquímicos y el vertido de efluentes y residuos industriales sin tratamiento.
Sebastián cuenta que lo primero que filmaron fueron los muestreos llevados a cabo por investigadoras de la Universidad de San Martín. “Fue una experiencia muy interesante recorrer todo el cauce con ellas, fueron muchas horas, es realmente es trabajo muy grande y profesional el que hicieron”, afirma.
Después se dedicaron a rodar entrevistas, imágenes del pueblo y del río, y a recolectar material de archivo a través de fotos y videos. “En este proceso encontramos muchas fotos interesantes que nos hicieron dimensionar la historia y todo lo que pasó por nuestro río; este intercambio con los vecinos fue muy enriquecedor”, reflexiona.
Sebastián cree que la contaminación afecta a la comunidad local de muchas maneras, siendo la primera el impacto en la biodiversidad y la calidad del río; pero el pueblo también está viviendo una pérdida cultural y de identidad: “Cuando ves las imágenes de la cantidad de gente que pasaba sus tardes en el río, practicando deportes, refrescándose, en familia, con amigos, te das cuenta de que no solo le estamos dando la espalda al ambiente sino también a nuestra cultura”.
Por eso, lo que más le impactó de las entrevistas fue que todos los vecinos con los que hablaron tenían recuerdos muy vividos y presentes de sus vidas en el río.
Un documental con propósito
El mayor desafío que encontró para contar esta historia fue lograr hacer la película que tenían en la cabeza, poder transmitir y despertar las sensaciones que querían y contar la historia de una manera objetiva y clara, con la que todos nos pudiéramos identificar. “Por suerte, con los que los compartimos fue así, y esperemos que les guste a todos”, pronostica.
Con un enfoque en la vivencia cultural, el documental cuyo adelanto fue compartido con Minúscula logra conectar al espectador con la historia del pueblo, invitándolo a hacerse nuevas preguntas.
A partir de testimonios sobre las carreras de natación en el río, o la época de las tardes en el Club Náutico y sus botes naranjas, destaca la importancia que supo tener este punto de reunión para los arequeros.
“Queremos mover las fibras de la gente, despertar su nostalgia y buenos recuerdos. Nos gustaría que al ver está película los arequeros dimensionen lo importante que fue y que es el río para todos nosotros”, concluye el realizador.
El estreno se espera para diciembre. Podés seguir las novedades y el anuncio formal de la fecha a través de nuestra web y redes sociales.
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Minúscula 
Qué ganas de verlo!!!!
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