La película se estrenó en la UNSAdA con la presencia de su director, Sebastián García, quien dialogó con los espectadores luego de la proyección. El film narra la relación histórica entre los arequeros y el río Areco, destacando los desafíos ambientales y su impacto cultural.
San Antonio de Areco, Buenos Aires – Este miércoles 20 de noviembre a las 18 h, en la Universidad Nacional de San Antonio de Areco (UNSAdA), se estrenó «Voces del río, el primer documental ambiental realizado en la ciudad. La película, dirigida por Sebastián García y producida por delpueblo, explora la histórica conexión entre los arequeros y el río Areco, exponiendo su estado de contaminación.
Un viaje entre pasado y presente
«Voces del río» aborda la conexión entre la comunidad y su entorno natural, explorando cómo el deterioro ambiental del río ha transformado tanto el ecosistema como la vida cotidiana del pueblo. A través de testimonios de vecinos, imágenes de archivo y escenas actuales, la película rescata la importancia del río como un espacio de encuentro y recreación que marcó generaciones.
El documental pone en evidencia los altos niveles de contaminación detectados en el río Areco, incluyendo plaguicidas y metales pesados, y reflexiona sobre cómo esto no solo afecta la biodiversidad, sino también la memoria y la cultura del lugar.
Una producción local y colaborativa
«Voces del río» es una obra que celebra el esfuerzo colectivo y local. Con un equipo compuesto mayoritariamente por arequeros, Sebastián García y Manuel Alonso lideraron un proyecto que incluyó a colaboradores locales como Joaquín Telesca, Lulú Magdalena, Nahuel Alfonso, Isaías Maiola, Facundo Cárdenas y Gonzalo Meo, entre otros.
“La idea siempre fue contar una historia representativa, que hablara desde la voz de quienes viven en el pueblo y han visto la transformación del río con sus propios ojos”, explica Sebastián García.
Un mensaje de conciencia y acción
La película busca movilizar a los espectadores a cuidar no solo el ambiente, sino también la esencia cultural que el río representa para San Antonio de Areco. Por eso, se anunció con el llamado a la acción: “Cuidar nuestro ambiente es proteger nuestra cultura”. Escenas de las tradicionales carreras de natación, tardes en el Club Náutico y recuerdos de infancia junto al río destacan la necesidad urgente de recuperación ambiental.
“El río fue y puede volver a ser el corazón del pueblo. Este documental es una invitación a reflexionar sobre nuestra relación con el entorno y a tomar acción para protegerlo”,
concluye García.
Repercusiones de su estreno en la UNSAdA
La cita fue una oportunidad para escuchar al director y dialogar sobre el proceso creativo detrás de esta obra que prometía emocionar y despertar conciencia.
Sebastián García presentó la película y compartió su motivación: “Me considero activista, que para mí no es nada disruptivo, se trata de romper un poco con la inercia y pasar a la acción.” Explicó que, como indica la palabra, “se trata de activar,” y que ese es precisamente el propósito de su documental.
“Debemos despertar en todos los que están acá, y quienes la vean después, una fibra emocional que nos haga pasar a la acción y entender que el problema de nuestro río es grave, que la pérdida no solo es ecosistémica, sino que es cultural. Entre todos, de manera unida, debemos dar el primer paso para revertir y mejorar la situación.” concluyó.
El documental estará disponible en YouTube con acceso libre durante un mes:
Al finalizar la proyección, los espectadores se mostraron emocionados, compartieron sus recuerdos en el río e intercambiaron opiniones con respecto a la temática. Asimismo, se repitió la interrogante sobre qué pueden hacer los vecinos para acelerar soluciones.
Movidos por este deseo de actuar, un grupo de asistentes creó y comenzó a circular un petitorio dirigido a las autoridades, exigiendo que la contaminación del río Areco se declare tema de interés prioritario. En el formulario expresaron: “Pedimos que abordar este problema sea de carácter prioritario para el municipio, que se adopten medidas concretas y sostenibles para mejorar su calidad ambiental, y que ese compromiso refleje el enorme valor que este río tiene para todos los habitantes de San Antonio de Areco”.
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