Bajo el lema 2024 que conmemora la Semana Mundial de la Lactancia Materna: Cerrar la brecha, te invitamos a reflexionar sobre las desigualdades que atraviesan las madres que amamantan y sus bebés en el ámbito laboral.
La Semana Mundial de la Lactancia Materna se conmemora del 1 al 7 de agosto en más de 120 países desde 1990. La fecha fue instaurada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y UNICEF para concientizar y estimular la acción sobre temas relacionados con la lactancia materna.
Entendemos a la maternidad como un factor de desigualdad en la sociedad y una de las grandes brechas que atraviesa es en el ámbito laboral y en la repartición de las tareas de cuidado.
¿Cómo afecta esto en la lactancia?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses de vida, momento en el que se empiezan a incorporar gradualmente otros alimentos.
Esta recomendación es por motivos nutricionales, de desarrollo y de vinculación familiar. Agregando que, se aconseja que la misma se extienda mínimo hasta los 2 años del bebé, dado que la lactancia materna es la principal y más óptima fuente de nutrientes para el buen crecimiento físico, neurológico e inmunológico del bebé.
A razón de esto, la OMS comparte algunos datos sobre los beneficios de la lactancia materna:
♦ Hay un 60% menos de riesgo del síndrome de muerte súbita.
♦ Reduce el riesgo de sobrepeso y obesidad en un 13%.
♦ Aumenta la inteligencia de los bebés, tienen 3,4 puntos más en los indicadores de desarrollo cognitivo.
♦ También es positivo para las madres. Reduce los riesgos de padecer diabetes, cáncer de mama o de ovarios.
¿Cuál es la situación en nuestro país?
En Argentina, la licencia laboral por maternidad es de 3 meses. Este número no solo es la mitad del tiempo que se recomienda, sino que expone la vulnerabilidad a la que se enfrentan tanto las madres como sus bebés ante sus derechos.
Por otro lado, la Ley 20.744 de Contrato de Trabajo anuncia en el Art. 179 que toda trabajadora madre de lactante podrá disponer de dos (2) descansos de media hora para amamantar a su bebé en el transcurso de la jornada de trabajo. Además, explica que si no podés amamantar a tu bebé dónde trabajás, podés sumar ese tiempo y trabajar una hora menos por día durante el período indicado.
Además, la Ley 26.873 de Promoción y Concientización Pública sobre Lactancia Materna promueve la creación o adaptación de las normativas necesarias para las madres que trabajan en periodos de lactancia.
Si bien las políticas públicas acompañan, todavía faltan medidas, acciones y buenas prácticas para proteger fielmente los derechos de las madres y sus bebés. La implementación de lactarios en el ámbito privado, como espacios limpios, sanos y seguros; la prolongación de las licencias por maternidad y la flexibilidad laboral no solo colaboran con la buena lactancia con fines nutricionales, sino que también, contribuyen a que el porcentaje de deserción o aplazamiento en el ámbito laboral y/o profesional sea menor.
Desde Revista Minúscula apoyamos estas recomendaciones y visibilizamos estas problemáticas que atraviesan las maternidades, respetando las decisiones o situaciones particulares de cada mamá.
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